La cascada

cascada
Amanecer. Trabajadores, profesores, secretarias, autoridades y estudiantes atraviesan la puerta principal para retomar sus actividades cotidianas… Al ingreso, una manifestación de lo natural y lo artificial yace imponente, tranquila a un costado de la puerta. Agua y roca, plantas y luces, todo junto para despertar el carnaval de impresiones de quienes la observan, algunos con alegría, otros con desdén…

Las cascadas siempre han sido motivo de inspiración: cantores, poetas e incluso hombres de ciencia… Sus motivaciones para erigir a este elemento natural en sus creaciones tiene diversas connotaciones, pero ¿por qué esta Facultad lo ha acogido? ¿Cómo símbolo de poderío? ¿De orden y disciplina? ¿Es acaso un monumento a lo que se puede hacer usando la represión como política interna? Nadie lo sabe con exactitud…


Por lo pronto, la cascada se disfruta, se aprecia. Se la mira desde afuera a través de la pared de vidrio o desde adentro, tal como si fuera una atracción en un zoológico de fama mundial. Que esta transformación se dé, no sólo en la estructura de la Facultad, sino también en lo recóndito de todos quienes conforman este lugar, en hábitos, en actitudes y sobre todo, en calidad…

Ausente

Los comentarios ofensivos, ilegibles, sin sentido o SPAM serán eliminados.

Thanks for your comment